Nos falta mucho

Aprovechando que estoy de pasada por mi país, quisiera comentar algunas cosas que me han pasado en las dos veces que fui a ver fútbol al Estadio El Campín. Le aclaro a la mayoría de lectores que a ese lugar no iba desde febrero de este año; esa vez tuve la oportunidad de ver a Santa Fe contra el Boyacá Chico.

Después de seis meses volví al Campín, fui a ver Santa Fe contra Nacional y la verdad el estadio cambió mucho, los nuevos arreglos lo dejan muy alto y preparado para recibir a las selecciones de Sur América en las próximas eliminatorias. Pero vamos a lo importante, la gente está volviendo a la cancha: a pesar de ser sábado fueron 20 mil personas.

Pero todavía hay algo que no cambia, al finalizar el encuentro, las personas encargadas de la seguridad le abren las puertas a las hinchadas de los dos equipos. Esto genera uno que otro enfrentamiento, en el que se ven involucrados todas las personas que asisten al estadio. Me tocó ver, una familia, todos hinchas de Nacional, que salieron muy tranquilos por la zona sur y fueron golpeados por hinchas de Santa Fe, que posteriormente, les robaron sus camisetas y banderas. Un acto de total cobardía, por que no fue una persona, fueron más de 50 los que se fueron contra este grupo que pagaron por la mala actuación del equipo bogotano y por la ineficiencia de la policía.

Una semana después, fui a ver Millonarios contra el Deportivo Cali. Un partido en el que se esperaba un lleno total, fueron 12 mil; seguramente si hubiera sido a las tres de la tarde, el número de personas sería el doble. La verdad un horario incomodo. Lo peor estaba por pasar, ya estaba ubicado en la tribuna, en ese momento estaba hablando por celular y una encargada de Millonarios (tenía una chaqueta con el escudo) se acerca a mi y me dice con un tono de soberbia: "Joven, usted no puede sacar fotos, ni grabar vídeos con el celular, le advierto, porque si lo veo haciendo eso me toca quitarle el celular. Debe tener un permiso de Millonarios para poder hacerlo".

Sé que en este momento soltaron la carcajada, yo me quedé en silencio y preferí ignorarla para no entrar en una discusión estúpida. No sé quién le dio la orden a esa señora, pero es una completa bobada, porque en estadios de equipos grandes a nivel mundial, se ve a las personas con los celulares, archivando en ellos un recuerdo de su ida a la cancha. Es cierto eso de la exclusividad, pero si el día de la muerte de Sadam Hussein un soldado grabó el momento con una cámara de su celular, ¡¡¡porqué!!! uno no puede guardar en su celular la foto de un equipo de fútbol.

La gente de Millonarios, primero debería preocuparse por el bajo rendimiento del equipo y por dejar de traer jugadores de otras ciudades que nunca van a sentir la camiseta. Lo de la exclusividad hay que dejarlo atrás, no creo que las imágenes que se reproduzcan desde un celular muestren algo diferente a lo que se ve en televisión.

Son un par de reflexiones para los dos equipo de la capital, la verdad, en los dos partidos vi buen fútbol y a cuatro de los mejores equipos que tiene el país. Sin embargo, esos detalles opacan el buen fútbol y molestan a los hinchas, que para la próxima vez lo pensarán más de dos veces para ir a ver a su equipo.