No es la primera vez que Millonarios es goleado contra un equipo “chico”, tampoco que sea el hazme reír de los equipos bogotanos, pues La Equidad y Santafe pelean la punta del torneo, mientras que los albiazules promedian la tabla.
Además no es raro que Millonarios jugando de local, se coma una goleada como la que sufrió ante en Chicó de Boyacá. Jugando pésimo, sin orden y sumado a los problemas internos que encabeza su DT Mario Vanemerak, los resultados hablan por si solos.
Ni Ciciliano, ni Estrada, ni Cochas, ni ninguno de los que prometía hacer algo bien en el equipo lo hizo ante los boyacenses y tampoco lo ha demostrado en lo que va del torneo. La impresición en la marca, la falta de ganas y de compromiso hace pensar que los mismos jugadores azules no quieren que el equipo progrese.
Incluso su propio DT que a pesar de ser hincha confeso del equipo Embajador, sus escándalos y malas actitudes, afectan al equipo que hace 20 años no gana en el torneo local.
Anoche en el Campín, sin jugar bien, desordenado, y dejando jugar a su rival, Millos de a poco vio como se llenaba su arco de goles y nunca reaccionó. La falta de ganas o de fuerza testicular que tienen algunos jugadores, hace pensar que algo anda mal, y no ahora, sino de hace mucho tiempo dejando como únicos damnificados a los hinchas.
Esos mismos que anhelan con ansias ver de nuevo al equipo más veces campeón de Colombia, coronarse una vez más. 20 años de sequía, 20 años de ilusión y 20 años de escándalo y fracaso seguido el uno del otro. 20 años sin alcanzar un título e irónicamente sumando más y más hinchas que, como por décimo tercera fecha, vieron caer humillado a su equipo en el Campín.
Por ahora, a Millonarios no le queda otra que mirar al frente y pensar en los siguientes rivales, y tratar de sumar como sea para clasificar a las semifinales de la Copa Mustang. De no conseguirlo tendrán que pensar en un revolcón institucional que elimine de una vez por todas a esa plaga que no deja que el equipo azul progrese.
Fecha goleadora.
La décimo tercera fecha del torneo colombiano dejó muchas cosas, sobre todo muchos goles. En 9 partidos se marcaron 31 goles dejando un promedio de 4,33 por partido. Sin embargo, en el que más se esperaba, Equidad frente a Santafe, que además era por la punta del campeonato, no se marcaron goles.
Medellín que cumplió su aniversario 95, goleó 5 por 0 al Bucaramanga y es líder único del torneo. Mientras que el Junior sigue como el candidato más