El entrenador Argentino ya no es más el director técnico de Millonarios, la comisión directiva tomó la desición de retirarlo del plantel después de evaluar su desempeño al cargo del equipo Embajador.
El estratega que asumió el cargo a mediados del campeonato pasado y en segunda fase de la Copa Sudamericana. Tuvo una campaña muy irregular, teniendo como máximo logro haber clasificado a las semifinales de la Copa internacional.
Sin embargo, la no clasificación a las finales del fútbol local y los actos antideportivos que protagonizó en varias ocasiones, lo dejaron entre ojos de la mesa directiva, y más aun cuando criticó el papel de algunos de ellos asegurando que no querían ver al equipo albiazul campeón.
El ex jugador y también hincha de Millonarios, fue protagonista de varios escándalos dentro y fuera de las canchas. Además del mencionado anteriormente concerniente a los directivos azules, el argentino también tuvo malas conductas como las del clásico ante Santafé y las del partido contra el Pasto, siendo estás últimas las causantes del despido y de una dura sanción de la Dimayor, prohibiéndole desempeñar cualquier papel deportivo dentro de la institución bogotana.
Muchos de los aficionados azules se sentían identificados con el estratega por su carisma, su amor al equipo y su garra a la hora de definir un partido. Sin embargo, si uno mira los resultados y la forma de jugar del equipo desde que llegó Vanemerak se dará cuenta de lo poco que alcanzó.
A pesar de haber llegado a una instancia desiciva de la Copa Sudamericana, y de haber dejado atrás a rivales importantes como Nacional, Colo Colo y Sao Paulo y de ilusionar a una hinchada que hace 20 años no lo ve ganar nada, era de esperarse que algún cariño le tomaran.
No obstante, su forma de dirigir, de expresarse sobre los rivales y de descontrolarse cuando pierde, mostraron la verdadera cara de Mario Alberto Vanemerak, aquel que en los años 80’s fuese figura del equipo azul saliendo campeón varias veces.
Ahora Millonarios quedó a la deriva, sin un sistema de juego claro, sin su entrenador y contra la pared, pues de los 15 puntos que quedan, tendrá que obtener por lo menos 10 para clasificar y pensar en romper la racha de dos décadas sin salir campeón.